Alma Eat is Life

Alma Eat is Life: la creatividad sin complejos
Alma Eat is Life
Alma Eat is Life
17 Agosto, 2021
FaceFoodMag
Cuando la salud es el ingrediente principal.

Alma Eat is Life es fiel al principio de que somos lo que comemos. Este concepto les ha funcionado a sus creadores a las mil maravillas en Ibiza ciudad y hace unos años lo exportaron a Port des Torrent, al Oeste de la isla, la playa tiene ese nombre porque está ubicada en la desembocadura de un torrente, es una playa turística y se encuentra rodeada de varias zonas comerciales y de varios hoteles. Su arena rubia hacen de ella una cala cómoda y muy familiar.

Alma Eat is Life

Está claro, por tanto que para los responsables de Alma, la salud es lo primero y no se conforman únicamente con usar un producto de primera y ecológico, en la medida de lo posible, sino que además han llevado el concepto de “saludable” un paso más allá llegando a organizar sesiones de yoga matutinas en la playa seguido de un exquisito y equilibrado desayuno. Por cierto que los desayunos son una de sus especialidades y su carta es una delicia para aquellos a quienes les gusta empezar bien el día, máxime cuando desde la mesa de la terraza te está deleitando con las soberbias vistas de la playa de fina arena blanca de Port des Torrent.

La chef y copropietaria, Paulina Maucevin ha desarrollado una carta que es, cuando menos heterogénea, podríamos decir que hasta ecléctica, ya que sus platos mezclan sin ningún tipo de complejo técnicas, preparaciones, especias e ingredientes de buena parte del mundo. En este caso nosotros pudimos degustar una coca con base de esbelta y cúrcuma a la brasa de salsa de tomate fresca, tomates cherry confitados, mozzarella de buffala, pesto, jamón serrano y rúcula; mejillones con salsa de curry massaman casero; hamburguesa thai de salmón 170 gr con pan de carbón y mayonesa de tofu; y triángulos “HULK”, baba ganoush, cebollas caramelizadas, almendras, queso feta y salsa de tahini. He de decir que todo estaba igual de exquisito que sorprendente. 

El postre que elegimos fue, cuando menos, igual de fascinante por inesperado y refrescante que el resto de la comida. Se trataba de un carpaccio de piña, con mix de frutas, chili, cilantro y helado casero de cúrcuma y limón.

Carpaccio piña

Pero la carta de Alma Eat is Life va mucho más allá y nos ofrece una buena variedad de carnes, verduras y pescados al horno o a la barbacoa, zumos, smoothies, refrescos bio, cócteles y, en definitiva, cualquier cosa que nos apetezca a cualquier hora del día. Eso sí, siempre con la máxima de que la salud es lo primero. 
 

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Santa Coloma de Gramenet, Barcelona

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