/ Pintxos

Te explicamos un poco de historia, la receta original y algunas variaciones para un bocado icónico inspirado en un personaje de película. 
El aperitivo sigue en auge, una cosa que los de la Vermutería La Sebastiana en el barrio de Amara de San Sebastián se dedican a celebrar. Pero saben de sobra que en realidad el concepto de aperitivo es solo una excusa para poder juntarte con amigos, picar algo rico y pasar un buen rato. Y con ese fin en mente, han creado una carta sumamente fácil de disfrutar y compartir, con una selección de conservas impresionante.

Taberna Mikel Bengoa es ya un referente para quienes buscan en Bizkaia cocina tradicional vasca, platos de temporada y, más concretamente, piezas de pescado del Cantábrico que Mikel prepara al horno para solaz de su clientela. Ésta es su ocupación desde que hace una década cambió la profesión de camionero por la de cocinero y empezó a convertir en destino gastronómico la localidad de Meñaka.                         

A veces son las cosas sencillas las que nos enamoran. Y es el amor lo que pone en marcha proyectos chulos. En el caso de Bells Bar, las dos cosas son acertadas. Este bar-restaurante pequeñito ha nacido por amor y su carta enamora fácilmente a los clientes que se atreven a probar la apertura más reciente del casco antiguo de Donosti.

Ttipia, o ‘pequeño’ en vascofrancés, aporta al puerto de San Sebastián lo que le faltaba: un chiringuito desenfadado donde tomar algo fresquito. Su terracita es única en la ciudad por sus vistas al puerto y ambiente vivo.
Jose Mari es una taberna restaurante en la parte vieja donostiarra, la última apertura del cocinero Josean Merino, cuyos bares de pintxos PerretxiCo ya se han extendido desde Vitoria hasta Logroño, Santander, y Madrid. Con Jose Mari, Merino vuelve a sus raíces.
La nueva aventura del emprendedor Juan Carlos Antolín se llama Kobatxa, un nombre consecuente para un establecimiento enmarcado en una de las siete grandes bóvedas o covachas que sostienen desde hace dos siglos el casco antiguo de Vitoria - Gasteiz. Allí, con su piedra a la vista, ha concebido un bar restaurante con distintos ambientes que combina música, diseño y gastronomía para atraer a una clientela preferentemente femenina desde primera hasta última hora del día.

No hará falta explicar que la hostelería es sumamente complicada al otro lado de la barra, pues hacer funcionar un negocio requiere inversión económica, horas de dedicación y horarios a la contra. Mucho sacrificio. Así, es fuerte la tentación de agazaparse bajo el manto protector de los progenitores cuando estos comandan un restaurante de alta cocina con mucho reconocimiento y sobrado prestigio, como es el caso de Daniel García, chef de Zortziko, distinguido con una estrella Michelin y dos soles Guía Repsol.

La Tropical acoge a un heterogéneo grupo de clientes durante todo el año para los que ha creado distintos ambientes y una carta para todos los públicos.
Borja Moncalvillo, cocinero autodidacta, gobierna en Castro Urdiales un bar restaurante que combina la sencillez y el buen emplatado del menú del día con el derroche de imaginación, juegos y guiños ajenos de un menú degustación muy demandado. Lo que empezó como “una prueba”, tras dos décadas trabajando por cuenta ajena, es hoy un negocio asentado que prima el comedor y procura dejar atrás su pasado como bar de pinchos.

“El pimiento ha de ser verde, los tomates colorados, la berenjena espinosa y los amores callados”. No es cosa mía, lo dice una copla leonesa que adelanta el significado de la expresión meterse en un berenjenal, pues estos, en el campo, suelen estar sembrados de espinas puntiagudas que dificultan el trabajo y exigen trabajar con prudencia y debida protección.

Siempre lleva la siguiente frase por bandera: ‘No existe modernidad sin una buena tradición’. Atari Gastroteka. Un establecimiento referente en Donostia con una fraternal mezcla de ambiente local y turístico que hinca sus raíces gastronómicas en la tradición de la cultura vasca con toques de diversos fogones del mundo. La materia prima de calidad es la base, el punto de partida de sus suculentos pintxos y raciones. Su popular terraza es una de las más demandadas de la ciudad, ya que se halla en pleno corazón de la urbe, frente al pórtico de una de las iglesias más importantes de San Sebastián.
A pocos metros de la popular calle donostiarra 31 de Agosto, en una bonita esquinita informal se halla el bar de pintxos La Cuchara de San Telmo. Uno de los 'must' de la Parte Vieja donostiarra por sus 17 años de trayectoria culinaria basada siempre en producto de temporada y de primera calidad. Un corner culinario con pintxos generosos tanto en sabor como en tamaño.

Pensar que hace falta arrimarse a la costa, a un pueblo con mar, para disfrutar en un restaurante especializado en pescado y marisco es una idea del pasado, un planteamiento equivocado que solo puede conducir a privarse del placer de comer dicho género a decenas de kilómetros de un puerto, un paseo o un muelle donde nos peine la brisa. Y más desde que los aeropuertos son la principal puerta de entrada de pescado (salmón, pulpo, pez espada, crustáceos, merluza…) procedente de países como Chile, Noruega, Namibia, Vietnam y Suráfrica.

En Tanos, núcleo urbano prácticamente cosido a Torrelavega, en el corazón de Cantabria, se mima el Pericote, la ancestral danza astur-cántabra, que ha servido como inspiración al restaurante de moda en la localidad.