/ Pizzeria

A pesar de que su origen no es italiano, y su formación tampoco tiene nada que ver con el sector gastronómico, estos dos jóvenes madrileños, Jorge de Blas y Hugo Rodríguez de Prada, son el alma mater de un exitoso proyecto que difiere mucho del concepto clásico de pizzería que tenemos en España. Un concepto 100% importado de Nápoles que seduce por igual al público más generalista y a los paladares más gourmets.

La pizza napolitana acaba de ser declarada por la Unesco Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Más que el producto en sí, lo que se reconoce es el trabajo de los 'pizzaioli', esos profesionales que desde hace más de doscientos años elaboran las masas, las hacen girar en el aire de forma espectacular y luego les añaden los ingredientes antes de introducirlas en hornos de leña para cocinarlas. Efectivamente la pizza nació en Nápoles.