/ Dani garcía
Si en la primera jornada de Tapa de l’Any el evento juntó a restauradores, tapas y amantes del buen comer, ayer los citados en el Hotel Melià de Sitges fueron profesionales.
Definida por la Wikipedia como el “proceso de cocción de alimentos por inmersión en un aceite o grasa comestible que está a una temperatura superior al punto de ebullición del agua, por lo general 150 a 200 ° C”, la fritura es una técnica que, cuando está bien elaborada, nos ofrece un resultado maravilloso en el que los alimentos quedan crujientes y dorados por fuera, jugosos por dentro, y la “magia” de no haber absorbido prácticamente nada de aceite.

Si hablamos de cocina malagueña, enseguida nos vienen a la cabeza imágenes del verano, la playa, la cervecita bien fresca junto al mar... y por supuesto, su reconocida fritura de pescaíto y los espetos, esa extraordinaria manera de asar a la lumbre, sobre todo sardinas, tras insertarles una caña...
Aerolíneas internacionales como Iberia, British Airways, Lufthansa o Delta Airlines están haciendo últimamente un sobreesfuerzo para ofrecer una mayor calidad en los alimentos que sirven a bordo. Algunas de ellas incluso han pedido ayuda a grandes chefs para crear nuevos menús adaptados que signifiquen una solución a la demanda de mejores recetas en las alturas.