Conocido con múltiples nombres como cabracho, escorpena o gallineta, este pez de vivos colores rojos es muy valorado en la gastronomía española por su intenso sabor a marisco. Pese a sus venenosas espinas, con él se elaboran multitud de platos, entre ellos, el famoso pastel de cabracho o pudding de Krabarroka ideado por el chef vasco Juan Mari Arzak.