Börek, delicias turcas en formato 'fast food'

Börek, delicias turcas en formato 'fast food'
Börek, delicias turcas en formato 'fast food'
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Con los años, nos han legado alimentos rápidos de diferentes orígenes que hemos ido incorporando a nuestra gastronomía, como las hamburguesas norteamericanas, los kebabs asiáticos, los tacos mexicanos o las empanadas argentinas. Pero en todo el mundo existen infinidad de platos de comida rápida que tal vez algún día llegarán aquí y se abrirán tiendas como florecen ahora los establecimientos dedicados a las empanadas. 

Uno de estos alimentos rápidos que podría triunfar en nuestra casa es el börek, que se consume en Turquía y en la mayoría de países del antiguo imperio otomano, como Albania o los que durante años formaron la desaparecida Yugoslavia (Bosnia, Serbia, Croacia, Macedonia o Montenegro). En algunos de estos países, la misma preparación tiene otros nombres, como en Bulgaria, donde llaman banitsa a su versión del börek de queso. 

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Pasta filo rellena 

De un país a otro, a veces cambia la forma y el relleno, pero en general podemos decir que el börek se prepara con pasta filo rellena de queso, carne y/o verduras, enrollada y enroscada como si fuera una ensaimada, grande como las de Mallorca. Y también se puede preparar en capas de pasta y relleno, como si fuera una lasaña, o en porciones individuales, pero la forma de ensaimada es la más habitual. 

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La pasta filo es una lámina muy delgada de masa típica de la cocina mediterránea oriental y de los Balcanes, que se prepara superponiendo capas y doblándola o enrollándola formando rollitos o capas parecidas al hojaldre. La pasta utilizada en Turquía para los börek, llamada yufka, es muy similar a la filo. 

En cuanto a los rellenos, uno de los más populares es el de espinacas y queso: en Turquía utilizan una variedad difícil de encontrar aquí, y que podemos sustituir perfectamente por queso feta. Pero el börek admite todo tipo de rellenos, tanto de verduras como de carne picada, y os proponemos tres, también con tres formatos diferentes, enrollado, en forma de lasaña o individual. ¡Está claro que podemos darle la forma que más nos guste!

Börek de queso y espinacas 

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Ingredientes:

1 paquete de pasta filo 

400 g de espinacas cocidas 

1 puerro o 1 cebolleta 

200 g de queso feta 

100 g de queso para untar 

Anacardos 

Mantequilla 

Nuez moscada

Canela en polvo 

1 yema de huevo 

Preparación:

- Ponemos una cucharada de mantequilla a deshacer en una sartén y añadimos los anacardos picados, y los dejamos dorar unos minutos. Añadimos la parte blanca del puerro o la cebolla picada, removemos bien y dejamos que se ablande durante 4 o 5 minutos, a fuego medio. 

- Picamos las espinacas escaldadas y bien escurridas y las añadimos a la sartén, con una pizca de canela y de nuez moscada. Dejamos que se integre bien durante un par de minutos y añadimos el queso feta cortado pequeño y el queso de untar. Volvemos a mezclar bien y acabamos de cocer durante tres o cuatro minutos. Reservamos. 

- Deshacemos dos cucharadas de mantequilla en el microondas. Extendemos una hoja de pasta filo, la pintamos con mantequilla con un pincel de cocina y ponemos encima otra hoja. En uno de los lados, ponemos una fila de relleno, como si hiciéramos canelones, y enrollamos la pasta filo. Obtendremos un canelón largo que pondremos en un molde de pastelería o en una bandeja redonda que pueda ir al horno (forrada con papel vegetal) pegada a la parte exterior. Repetiremos el proceso y pondremos el segundo canelón a continuación del primero, formando círculos como los del caparazón de un caracol o de una ensaimada. 

- Cuando tengamos la bandeja llena, la pintamos con huevo batido y la entramos en el horno precalentado a 180º C unos 15 minutos, o hasta que la pasta filo esté dorada y crujiente. 

Banitsa de queso 

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Ingredientes:

1 paquete de pasta filo 

400 g de queso feta 

400 g de yogur 

4 huevos + 1 para pintar 

250 ml de agua con gas 

Aceite 

Preparación:

- Batimos los 4 huevos y les añadimos el yogur y el agua con gas, hasta que queden bien mezclados. 

- En un cuenco, deshacemos el queso con las manos o con un tenedor, añadimos la mezcla anterior y mezclamos bien. 

- Con un pincel de cocina untamos una bandeja de horno y extendemos una capa de pasta filo, la pintamos, ponemos otra encima, la untamos también y añadimos otra. Repartimos por encima una tercera parte del relleno. Repetimos la operación, alternando tres capas de pasta filo y relleno, hasta terminar con una capa de filo. 

- Pintamos la superficie con huevo batido y llevamos la bandeja al horno precalentado a 180º C durante 30 minutos o hasta que la superficie tenga un bonito color dorado. 

- Se sirve cortando la banitsa en cuadrados que puedan comerse con la mano. 

Böreks individuales de carne 

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Ingredientes:

12 láminas de pasta filo 

500 g de carne picada de ternera 

1 cebolla 

1 diente de ajo 

1 c/s de zumo de limón 

1 c/s de miel 

1 c/s de granito de almendra cruda 

1/2 c/p de comino mucho 

1/2 c/c de canela en polvo 

1/2 c/c de nuez moscada rallada 

1/2 c/c de cúrcuma 

Unas hebras de azafrán 

Semillas de sésamo 

Mantequilla 

Aceite, sal y pimienta 

Preparación:

- Picamos la cebolla y el ajo y los ponemos a sofreír en una sartén con aceite; cuando se haya vuelto transparente, añadimos la carne. Seguimos sofriendo hasta que la carne cambie de color y añadimos el granito de almendra, la miel y las especias, mezclamos bien y añadimos el zumo de limón. Apartamos del fuego y dejamos reposar. 

- Mientras tanto, cortamos las láminas de pasta filo en cuadrados de 20 centímetros de lado. Pintamos una con mantequilla y pegamos otra encima. En una punta del cuadrado de pasta ponemos una buena cucharada de relleno y empezamos a enrollar, doblando los lados hacia dentro para cerrar el rollito, y acabamos de enrollar. Pintamos por encima con mantequilla y esparcimos semillas de sésamo sin tostar por encima. Repetimos el proceso hasta terminar la pasta. 

- Los ponemos sobre una bandeja con papel sulfurado en el fondo y metemos en el horno precalentado a 180ºC durante 25 minutos o hasta que los rollitos se hayan dorado.