Taberna El Papelón: la cadena que rescata las míticas tascas de chacinas y cocina andaluza

Ante el boom de restaurantes de cocina fusión y una oferta gastronómica cada vez más globalizada en las ciudades, Rafael Ruiz, fundador de las tabernas El Papelón, tenía la misión de preservar la esencia de las tascas de siempre, aquellas donde se despachaban chacinas, embutidos y encurtidos en papel de estraza.

Las Tabernas El Papelón guardan la esencia de aquellos bares que se llenaban de parroquianos a la hora del aperitivo para arreglar el mundo -o su mundo- y comentar el último chisme del barrio entre tapas de queso y vinos a granel. Sin embargo, aunque conserven la oferta gastronómica más tradicional, lo hace desde una mirada más actual y contemporánea, conjugando el clasicismo más castizo con propuestas más modernas, como el brunch o el tardeo.

Quesos, chacinas y cocina tradicional andaluza

En su propuesta gastronómica encontramos desayunos, aliños y encurtidos, guisos tradicionales, focaccias, montaditos, tapas, arroces y en muchas de sus tabernas, un menú diario con primero, segundo y postre, ideal para el personal de oficina.

Su especialidad son los quesos -ofrecen más de treinta referencias- y las chacinas, todas ibéricas, dando un salto de calidad desde sus primeros pasos, cuando buscaban situarse en un rango más low cost. “Ahora nos consideramos una taberna gourmet”, comenta María Freixa, responsable de márketing de la franquicia.

Esta oferta se ha ido ampliando a lo largo de los años para satisfacer la demanda de su clientela -mayoritariamente extranjera- que también se interesaba por los guisos y tapas de cocina local.

Es por eso que en Tabernas El Papelón puedes encontrar una gran variedad tapas de cocina andaluza, como carne con tomate, potaje de garbanzos con chorizo, carrillada al vino tinto, solomillo al whisky, espinacas con garbanzos, cola de toro o albóndigas, entre otras recetas icónica de nuestra gastronomía. 

Además de guisos, también se pueden disfrutar propuestas de picoteo frío, como ensaladilla, patatas aliñás o ensaladas, y conjugarlas con otras calientes, como las clásicas frituras de adobo sevillano, boquerones, tortillitas de camarones, calamares o las croquetas de puchero.

Y por supuesto, en una oferta como la de El Papelón, que reivindica los sabores castizos, no podían faltar los arroces, que puedes disfrutar a la marinera, al estilo campero o el negro con alioli.

En cuanto a los desayunos, disponen de una carta repleta de tostadas con diferentes tipos de panes, como integral, pan blanco o de semillas, al que puedes añadir sus chacinas, como jamón ibérico, morcilla, salchichón, caña de lomo, chorizo, chicharrón o la tradicional carne mechá andaluza, entre otras propuestas.

A esta propuesta han sumado los famosos brunch que les permiten acceder a un rango más amplio de público y que sirven a diario en todos sus locales, así como el tardeo, con promociones de copas y la retransmisión de partidos de fútbol en muchos de sus establecimientos.

Además de que todas sus raciones pueden disfrutarse en local, para llevar o a domicilio, también ofrecen un servicio de catering para eventos y celebraciones, donde se encargan de proporcionar sus tradicionales viandas.

Aunque la esencia de su carta es la misma en todos los locales, pudiendo disfrutar de su cocina abierta todo el día, tapeo y papelones, no en todos cuentan con la misma oferta gastronómica.

Algunos de ellos -como el de Torre Sevilla que visité para esta reseña- cuentan con una oferta de carnes para complementar su propuesta gastronómica, con platos de pechuga de pollo, secreto, presa servida con ensalada y patatas fritas, o un surtido de todas ellas en una tabla perfecta para compartir.

Doce restaurantes y tres ciudades

La cadena franquiciada cuenta con doce establecimientos repartidos en tres ciudades -ocho en Sevilla, uno en Alicante y tres en Madrid-, donde busca emplazamientos en lugares emblemáticos cercanos a los puntos de interés turístico.

La decoración de sus locales es acorde a su propuesta, todos transmiten la sensación de aquellos bares de la primera mitad del siglo XX, despertando la nostalgia con sus enormes toneles, mesas palilleras, jamones colgando tras la barra y las chacinas a la vista en un enorme expositor de estilo charcutero.

En definitiva, si eres un amante de los quesos, las chacinas y los guisos tradicionales, y quieres (re)vivir una experiencia tabernera clásica, busca tu Taberna El Papelón más cercana donde te esperan los sabores de siempre desde primera hora de la mañana.