Cinco consejos y trucos para preparar las comidas de Navidad

Cinco consejos y trucos para preparar las comidas de Navidad
Cinco consejos y trucos para preparar las comidas de Navidad
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En ocasiones pensamos que para cocinar un plato espectacular se necesita mucho tiempo y grandes conocimientos. A ver, el conocimiento nunca sobra y obviamente tiene más facilidad y probabilidad de éxito quien acumula horas de vuelo ante el fogón. Aún así, con un buen producto y algunas ideas básicas podemos conquistar a nuestros comensales de forma sencilla y sin complicarnos la vida más allá de lo esencial. 

1 - Cómo preparar correctamente los langostinos:

Has comprado esos langostinos hermosos (o gambas, que el truco vale igual) y quieres sacarles el máximo partido posible. Una opción es la cocción en agua para dejarlos al punto, que no está mal pero tiene el inconveniente de que parte del sabor se quedará en la olla cuando los retires para llevar a la mesa. En cambio, cocinar los langostinos en una plancha o paella directamente sobre sal permite que los jugos crustáceos permanezcan en el interior de esas cabecitas tan churrupables y además es mucho mejor que plancharlos sobre grasa: al contrario que esta, la sal no se requema nunca y así no añades sabores bastardos a ese bocado especial. ¡Pruébalo y nos cuentas!

2 - Cómo preparar un sabroso 'magret' de pato:

Para sacar el máximo partido de un magret de pato, realiza unos cortes en forma de cuadrícula sobre la piel, que sean profundos sobre la capa de grasa pero que no lleguen hasta la carne. Deposita siempre el magret sobre la sartén por la parte de la piel y sin grasa añadida. Por los cortes penetrará el calor y se fundirá la grasa. La carne quedará protegida y jugosa y tan solo ha de recibir calor directo durante unos segundos finales para que coja algo de color. 

Una buena opción es acompañarlo de chalotas glaseadas y una salsa agridulce de mandarina: caramelizamos tres cucharadas de azúcar en una sartén. Con cuidado por las salpicaduras, añadimos un vaso de zumo de mandarina y medio vaso de vermut. Reducimos hasta tener una salsa y rectificamos de sal y pimienta.

3 - Cómo saber si un caviar es fresco:

Para saber si el caviar que te has regalado para fiestas es fresco, utiliza una cucharadita menuda no metálica para colocarlo en el dorso de la mano (entre los dedos pulgar e índice). Degústalo y disfruta, tras ese momento en la mano no ha de quedar ningún aroma residual de pescado.

A mí el caviar me gusta sólo, sin tostaditas ni nada más. Pero si vas a ponerle un sustrato crujiente, asegúrate por lo menos de que la temperatura del caviar ronde los 30º (si está frio no se aprecia la sutilidad aromática), utiliza cucharas de madera, hueso o nácar (el metal cambia su sabor) y nunca añadas mantequilla ni otras grasas que desvirtúen el producto. Para lo que cuesta, disfrútalo al cien por cien.
 

4- Cómo preparar y servir las ostras:

Abrir una ostra requiere de un cuchillo especial que protege tus manos ante resbalones accidentales mientras haces presión. Es importante que consigas uno de estos utensilios, que son muy baratos y se encuentran muy fácilmente en cualquier tienda de menaje.

Para abrirlas, introduce la punta por la juntura estrecha de la ostra y desliza la hoja en paralelo a la concha superior para cortar el músculo que mantiene juntas las valvas. Intenta que el jugo interno no se derrame, es delicioso.

Además de comerlas al natural, también se pueden cocinar. Una receta sencilla es pasarlas unos minutos por la brasa para que se hagan en su propio jugo. Y otra muy resultona es pasarlas por una masa de tempura y freírlas muy brevemente para que queden crujientes por fuera y muy jugosas en el interior. Yodo a tope para disfrutar.

5- Cómo darle un toque especial al turrón de Jijona:

¿Quieres darle un toque especial al momento turrón de tu cena de Navidad? Prepara esta mousse de turrón muy fácil de hacer, no necesitas ni fuego.

Pica muy fino 250 g de turrón de Jijona y mézclalo con 125 g de mantequilla en punto de pomada y un huevo. Trabájalo hasta formar una masa uniforme algo rústica. Monta 750 ml de nata con las varillas (eléctricas, si es posible que ganarás tiempo) y añade la mezcla anterior. Mezcla delicadamente hasta que todo tenga textura de mousse y ponlo en copas o vasos chulos para servir. A la nevera hasta el momento de servir. Puedes decorar con granulado de almendras o virutas de chocolate.